martes, 24 de julio de 2012

Cauca verde

Los puntos de contacto entre los indígenas del Cauca y las Farc están dados por los encuentros y los desencuentros de la convivencia. Para unos y otros esas montañas han sido santuario, aunque difieran en los ritos y las estrategias para protegerlas. El mismo Presidente Santos dio hace poco una prueba involuntaria de cómo el Estado obligó a los indígenas, por la vía de la omisión y la incapacidad, a tener como socio, contraparte y verdugo al Sexto frente de las Farc. Dijo que hasta hace poco el ejército, o sea la avanzada primaria del Estado, solo llegaba hasta la carretera Panamericana y dejaba las montañas en manos de los dioses tutelares y la guerrilla ancestral. Los indígenas han sabido resistir a las intenciones de las Farc de tomarse un movimiento con historia y credibilidad internacional. Para la guerrilla el Cauca no es solo un corredor clave sino un escenario para esconderse tras unas banderas vendedoras y un pueblo con capacidad de hacerse sentir sin acudir a la dinamita. Los graves problemas de infiltración están relacionados con las “golosinas” que los jefes guerrilleros ofrecen a los más jóvenes. Los celulares, la moto, el salario base de 300.000 pesos pueden hacer olvidar la leyenda de Quintín Lame y el poder de los bastones de mando. Las historias de los milicianos en Toribío y Caldono no son muy distintas de las que se viven en las esquinas de la Comuna 13 y Aguablanca. El bombardeo del ejército sobre un campo de entrenamiento de las Farc en marzo del año pasado, lo demostró con un saldo trágico. El ejército habló de 15 guerrilleros dados de baja mientras en la región se lloró la muerte de 15 adolescentes con apenas dos meses en la trinchera de Pacho Chino y compañía. Existe una solución a la mano para que el Cauca ofrezca alternativas de empleo a los jóvenes. Para que la agricultura no sea un negocio imposible que necesita la subvención del gobierno Alemán o la donación de un trapiche por parte de una ONG canadiense. Está dada por la perfecta combinación del paisaje, los encantos de la multiculturalidad -o del simple pintoresquismo, para no ir tan lejos- y el liderazgo nacional en la siembra de marihuana. Cada mes salen de las montañas del Cauca 30 toneladas de hierba fresca para abastecer el mercado nacional y el gusto refinado de algunos extranjeros en Europa. Si fuéramos capaces de convertir la noticia repetida de grandes decomisos -encontré uno de toneladas para los meses de octubre y diciembre de 2011, y para marzo, abril y julio de 2012- en cosechas que no tuvieran la dosis de pago a ejército, policía más vacuna a las Farc, estaríamos frente a una economía sostenible y olorosa. El enjambre de los mochileros sería la añadidura perfecta. Si en España y California hay negocios rentables y legales con la marihuana por qué no podría haberlos en Colombia. Si en los alrededores de Corinto y Toribío hay cientos de invernaderos con las matas enmoñando bajo un resplandor de bombillos, qué más da ponerles un sello de garantía y control para sacarlas de la economía de guerra. Pero me temo que estamos lejos. El Invima ha puesto todas las trabas posibles a la venta de una gaseosa, unas galletas y unas aguas aromáticas a base de coca, inofensivas y rentables al mismo tiempo, así que será difícil que el Cauca pueda ofrecer sin complejos y sin plomo uno de sus principales productos agrícolas.

11 comentarios:

Pascual Gaviria dijo...

Una crónica en Don Juan sobre la marihuana en Corinto.

"-Si voy a vender mi plátano me toca pagar un transporte que me vale 20.000 pesos hasta Santander de Quilichao (a dos horas de distancia), si logro vender cinco palos de plátano me dan 7.000 pesos, si no logro venderlos me toca botarlos. Con la marihuana vienen los compradores, pagan chan con chan (de contado) y se van sin preguntar nada.
De cada planta se obtienen 350 gramos aproximadamente. Sumando las 2.000 plantas da un total de 700.000 gramos, que en libras significan 1.400, y en arrobas 56. En la región el precio actual por arroba es de 170.000 pesos. En un mes, cuando Carmen coseche, seque, desmoñe y venda, va a cobrar 9'520.000 pesos que son repartidos en partes iguales entre ella y su socio, otro campesino.
El tiempo que demora la hierba en germinar, crecer y "enmoñar" o florecer es de seis meses. Los 4'760.000 pesos que le corresponden de la mitad de la venta, es todo el dinero que tiene mientras sale otra cosecha: aproximadamente 793.000 pesos mensuales. Para iniciar un nuevo cultivo tiene que devastar toda la tierra, comprar una libra de semilla que cuesta 10.000 pesos, e invertir un millón de pesos en insumos y en el sueldo de tres trabajadores que le ayudan a desprender los moños después de que las hojas ya están secas. Cada uno cobra 20.000 pesos por jornada de 12 horas y trabajan durante una semana."


Marihuana de Corinto cien por ciento campesina

Pascual Gaviria dijo...

Una más de Salud Hernández sobre los cultivos en Tacueyó.
Las cifras:

"Por una arroba (doce kilos y medio) de marihuana creepy pagan doscientos mil pesos al cultivador (87 euros), de los cuales las Farc cobran sesenta mil (26 euros) como vacuna (impuesto) al comprador, siempre una persona venida de afuera, amparada por la guerrilla. Si se trata de la marihuana corriente, el agricultor sólo recibe 60.000 pesos por arroba, y por kilo de hoja de coca le dan 45.000 pesos (20 euros). Como buena parte de los labriegos siembran un poco de todo, obtienen una renta muy superior a la que generaban cuando tenían tomate, café, maíz y un poco de marihuana.
"Con la marihuana y la coca no hay intermediarios ni problemas con el transporte porque los compradores suben a la vereda. Y hay paisas (procedentes de Antioquia) que nos financian los cultivos mientras a nosotros el Banco no nos daría jamás un préstamo", se queja Fabio, un agricultor que también pide anonimato. "Yo tenía mora, tomate, pero me lo acabó una plaga y nadie me ayudó. Le metí coca y marihuana y ahí sí tengo apoyo, me la vienen a comprar y el precio es estable"."


Tacueyó: coca, café y marihuana

JuanDavidVelez dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
JuanDavidVelez dijo...

Pascual, yo vi el discurso de Santos, ¿lo de la falta de control y cuidar solo la carretera durante el gobierno de uribe será verdad?

No pude ver la fecha del articulo de donjuan, pero por los comentarios supongo que es de junio de 2011, da la impresión que el control del territorio del que hablaba uribe sí es más bien pura mierda.

Negar y dejar de agradecer lo que uribe hizo en materia de controlar a las farc es burrada me parece a mi, pero ese articulo de donjuan, lo que dice santos y otras cosas que he visto sí me hacen pensar que el control del territorio del que se jacta uribe siempre es que tuvo mucho de "cosmetico".

Pero bueno, la pregunta concreta es que opinas de eso que dijo Santos de la panamericana. gracias.

Pascual Gaviria dijo...

Juan David: creo que en este caso Santos está diciendo la verdad. Hace poco oí a Camilo González Pozo, el que fue candidato a vicepresidente en fórmula con Navarro, hombre que sabe del Causa, diciendo que el ejército estaba llegando a zonas que hasta hace poco estaban "escrituradas" a las Farc. También lo dice el artículo central de Semana sobre el tema. La estrategia militar es empujar a la guerrilla hasta la zona de los nevados, cerca de donde le dieron a Cano. Aunque ya sabemos que estando Santos de por medio Semana nos es fiar.

Pascual Gaviria dijo...

Aquí está la historia jurídica de la pelea de Coca Nasa, la empresa que produce la Coca Sek y otros productos. Se dice que el Cauca no es territorio independiente pero el gobierno le dice que solo puede comercializar la Coca Sek en los resguardos.

El Caso Coca Nasa

Harold Londoño dijo...

Muy buena columna. Eso es lo que los economistas llamamos aprovechar nuestras "ventajas comparativas".

Sólo le agregaría que en tiempos de TLC el potencial es mucho mayor.

Respetuoso saludo.

Juan F. Naranjo dijo...

Pascual, esta sería una verdadera locomotora de desarrollo. Además Verde, como gusta tanto ahora y sobre todo sostenible...según las cuentas ganan todos en la cadena y parece que de una forma equitativa. Genial columna...un abrazo.

JuanDavidVelez dijo...

Ok. muchas gracias

PABLO CUARTAS dijo...

Pascual,

Enlazo una excelente columna sobre el tratamiento de los medios del problema en el Cauca. Se trata de la penosa bravuconada de Luis Carlos Vélez, de su tonito ramplón y su pose de aleccionador indignado. Que responda sí o no:

http://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/ricardosilvaromero/interrogatorio-ricardo-silva-romero-columnista-el-tiempo_12068740-4

Un saludo,

Pablo

Pascual Gaviria dijo...

Lo de Juan Carlos Vélez fue vergonzoso. Aquí está otra columna sobre el vengador anónimo de Caracol TV.

El interrogatorio de Luis Carlos Vélez